Por Alexandra Serrano
«La humanidad no permanecerá atada para siempre a la Tierra»
Tsiolkovsky: Padre de la cosmonáutica
Hasta ahora la Tierra ha sido el entorno de la humanidad, aunque de este hecho no depende la condición humana. Hanna Arendt, filósofa alemana, afirma que hay tres condiciones básicas para la existencia humana, sin importar dónde se desarrolle, estas son: la labor, el trabajo y la acción.
Anousheh Ansari es una mujer que exploró la condición humana en la Estación Espacial Internacional. Ayer, esta astronauta de origen iraní, visitó el Centro de Tecnología e Innovación y nos contó cómo encaminó su existencia para el cumplimiento de uno de sus objetivo: ir al espacio.
Desde que era niña y dormía a la luz de las estrellas, ella soñaba con ir al espacio así que decidió convertir este sueño en una determinación.
La labor era complicada, tenía que encaminar las acciones de su vida cotidiana al cumplimiento de un objetivo, pero una de las principales limitaciones era que los viajes espaciales estaban monopolizados por el gobierno, por lo que fundó la compañía de viajes espaciales Prodea para que personas comunes pudieran viajar al espacio.
El trabajo no fue sencillo, primero se aleccionó en el Centro Cosmonauta de Entrenamiento Ruso donde tuvo que aprender un idioma nuevo y aprobar un entrenamiento físico que incluía vueltas en una centrífuga, y lecciones de supervivencia en el clima extremo de Rusia
En 2006, cuando Anousheh arribó a la Estación Espacial Internacional, encontró nuevos retos: tenía que ejercitarse mucho, ya que en el espacio se pierde masa muscular; además la falta de gravedad complicaba algunas cosas, otras simplemente las hacía divertidas, como tomar agua o lavarse el pelo. Anousheh estuvo diez días, veintiún horas y cuatro minutos en el espacio, período que para ella fue: “the time of my life”.
La acción que desencadenó este evento fue, para Anousheh, darse cuenta de que los sueños se cumplen, y que cuando has logrado tu más grande anhelo lo mejor que puedes hacer es construir nuevos sueños. Después de su viaje su labor ha sido llevar internet a pequeñas comunidades alrededor del mundo y trabajar en la investigación y desarrollo de internet de las cosas (IoT).
El anhelo por explorar el espacio es parte de la condición humana, pues representa las ansias del por trascender su existencia y llevarla a un nuevo nivel, con labor, trabajo y acción cotidiana al igual que Anousheh.
