Según Wikipedia, el término geek se utiliza para referirse a una persona fascinada por la tecnología y la informática. Seguramente sabes que un geek suele contar con bastantes habilidades técnicas, esto tal vez no sea totalmente bueno ya que un estudio parece indicar que los genes que se heredan no sólo son traen consigo talentos intelectuales, sino también predisponen al autismo.
En 1997, Sally Wheelwright y Simon Baron-Cohen realizaron un estudio en Reino Unido con cerca de 2,000 familias entre las que alrededor de la mitad tenía al menos un hijo con autismo, un trastorno del desarrollo en el que las personas tienen dificultad para comunicarse e interactuar con los demás además de mostrar un comportamiento obsesivo. Las otras familias tenían niños con síndrome de Tourette, síndrome de Down o algún retraso en el lenguaje, pero no eran autistas. En este estudio, se preguntó a los padres de familia cuál era su trabajo, muchas madres no habían trabajado fuera de casa, por lo que sus datos no fueron útiles, pero lo que resultó intrigante fue la respuesta de los padres: un 12,5 por ciento de los padres de niños con autismo eran ingenieros, en comparación con sólo el 5 por ciento de los padres de niños sin autismo.
Del mismo modo, el 21.2% de los abuelos de los niños con autismo han sido ingenieros, en comparación con sólo el 2.5% de los abuelos de los niños sin autismo. El patrón apareció en ambos lados de la familia. Las mujeres que tuvieron un hijo con autismo normalmente eran hijas de un ingeniero y se habían casado con un joven igualmente hijo de ingeniero.
Si aún no crees los números, déjame contarte que curiosamente lugares como Silicon Valley y otras comunidades con conocimientos tecnológicos reportan tasas excepcionalmente altas de autismo. Tendencias que pueden reflejar el vínculo entre los genes que contribuyen al autismo y los genes detrás de aptitud técnica.
¿Será?
Fuente: Scientific American
