El maíz es patrimonio biológico, agrícola, cultural y económico de México
CONABIO
Por Laurencio Alan García
El maíz fue un alimento sagrado para Mesoamérica, pues basó muchos de sus mitos, dioses y calendarios en torno a este preciado cereal. Los registros del maíz en las culturas prehispánicas se observan desde la civilización Olmeca, sin embargo, las más representativas son las derivadas de las narrativas del pueblo maya y el mexica.
Hoy en día, el maíz ya no está en la base de la cosmogonía mexicana, los acontecimientos sucedidos a lo largo de la historia nacional han cambiado esta percepción, aunque sigue siendo un alimento fundamental en la mesa, así como de gran importancia para la agricultura mexicana.
En la actualidad, el maíz figura como el principal cultivo de nuestro país y ocupa el 33% de la superficie de siembra en México; Sinaloa es el principal productor nacional. Aunque, según datos de la FAO, para 2050 la producción de cereales será insuficiente para la demanda.
Ante esta situación, se han creado centros para la investigación e implementación de tecnología que mejoren el cultivo y producción de cereales; esta es la misión del Centro Internacional de Mejoramiento del Maíz y Trigo (CIMMYT).
El CIMMYT es el primer centro a nivel mundial dedicado a la investigación y desarrollo de variedades de maíz y trigo, y a la capacitación sobre los sistemas de producción de estos dos cultivos alimentarios básicos. Desde su sede en México y sus oficinas en países del mundo en desarrollo, el CIMMYT trabaja con una red mundial de colaboradores en pro de reducir la pobreza y el hambre, incrementando de manera sustentable la productividad de los sistemas de cultivo de maíz y de trigo.
Con apoyo de la Fundación Carlos Slim y Fundación Bill y Melinda Gates, en 2013 se inauguró el complejo de biociencias del CIMMYT en Texcoco, México; a lo que el Ingeniero Carlos Slim señaló: “Esta alianza para impulsar la investigación y el desarrollo en el CIMMYT, con la colaboración de científicos nacionales y extranjeros dedicados a la mejora de semillas y a la generación de técnicas más eficientes, es el eslabón para trasladar este conocimiento en todo el mundo a todos los productores agrícolas, especialmente a los pequeños y medianos, así como para impulsar el crecimiento económico, el empleo, la autosuficiencia alimentaria y las exportaciones del sector.”
Por su parte, el Centro de Tecnología e Innovación busca implementar soluciones tecnológicas que incrementen la productividad del campo, claro ejemplo de esto es el proyecto “+Cosecha”, que planea aumentar el rendimiento de los cultivos entre un 10% y un 50% usando un dispositivo que emita sonidos y ultrasonidos para ahuyentar a las aves y otras especies nocivas para el campo.
En resumen, el cultivo del maíz tiene una gran importancia para México, tanto en el plano cultural como en el alimenticio, pues alimentos como la tortilla, los tamales y el pozole tienen como base este grano, es por eso que te invitamos a que sigas estos proyectos que buscan incrementar la productividad de los cultivos a partir del uso de tecnologías verdes.
